Efectivamente ETA ya murió y ni está ni se le espera. Por el contrario, lo que realmente está vivo y coleando es el nacoionalcatolicismo de la Iglesia católica española que es el soporte y el fundamento legitimador de la derecha extrema (PP) y de la extrema derecha y el fascismo (VOX). Como prueba, basta el botón de las perlas a las que nos tiene acostumbrado el obispo Munilla.
Muchas gracias José.
El obispo de Orihuela-Alicante contra el movimiento LGTBI
22-6-23. El obispo de Orihuela-Alicante, José Ignacio Munilla, ha aprovechado el lunes, 12-6-23, su programa diario en ‘Radio María’ para hacer un alegato contra el mes del orgullo LGTBI que se celebra durante el mes de junio. En concreto, ha cargado contra el uso de la bandera arcoíris y de la coincidencia en el calendario de esta celebración de la diversidad con el “mes del corazón de Jesús”. El obispo ha acusado al movimiento de “desfigurar” el arcoíris, “un símbolo bíblico de la unidad con dios”.
El obispo de Orihuela-Alicante defiende que “el arcoíris se ha desfigurado completamente”. “Tenemos que ir al Génesis para descubrir que el arcoíris es la imagen de la alianza”, ha defendido. “Ahora pasa de ser un signo de la alianza con dios a un símbolo del orgullo en el que el ser se desvincula de dios”, ha lamentado. “Es un símbolo de desvinculación, la prevalencia del deseo por encima de la ley de dios, la ley natural”, ha añadido.
El arcoíris, ha proseguido, es “una especie de Torre de Babel que se eleva desafiante”. Sin embargo, ha defendido que ésta cayó “porque lo que se construye sobre el barro no tiene consistencia”. “Esto también tiene los pies de barro, la ideología de género, la ideología LGTB”, ha defendido. “Está construida contra el propio ser del hombre, de la naturaleza, contra la realidad”, ha insistido. “Forzar la realidad no les lleva más que a la infelicidad”, ha zanjado.
COMENTARIO
Este obispo, y creo que no es el único, vive en un mundo irreal, porque con sus absurdas y ofensivas declaraciones sobre el movimiento LGTBI manifiesta una absoluta ignorancia sobre la diversidad de la sexualidad humana y sin lugar a duda también en otros aspectos. Su pensamiento y su actitud hostil contra los no heterosexuales se corresponde con la antropología bíblica anterior a Cristo, que no tuvo ninguna palabra de condena contra los homosexuales. De esa forma, este obispo y los de su especie queda desautorizado como cristiano y humanista por varias razones:
-Por pensar de forma opuesta a Cristo, demonizando a ese colectivo y desvinculándolo de Dios.
-Por despreciar la declaración de la OMS del 17 de mayo de 1990 que eliminó la homosexualidad de la lista de enfermedades mentales. Y no hace un par de años, sino 33 años.
-Por rechazar adaptarse a la actual antropología descrita por la psicología moderna.
-Por arrastrar, con su autoridad emanada de un dios homófobo y falso, a muchos creyentes para que consideren a los pertenecientes al movimiento LGTBI como seres desnaturalizados, desvinculados y despreciados por Dios. Lo cierto es que este obispo y todos los que piensan como él sí que están desvinculados de Dios.
-Por estar legitimado por las máximas autoridades de la Iglesia española o de la Iglesia universal, como son el presidente de la CEE o el Papa, en el caso de que no lo destituyan o le ordenen que rectifique sus palabras de desprecio hacia ese colectivo.
¡Basta ya de tanto odio, desprecio, persecuciones, expulsiones o sentencias de muerte, que fueron muy abundantes en la Iglesia clerical en toda su historia! ¡Cuánto sufrimiento aplicado sin el menor sentimiento cristiano ni humano contra los paganos, contra los judíos, contra los herejes, contra las mujeres consideradas poseídas por el diablo (la caza de brujas), contra los indígenas , contra los protestantes, contra los moriscos, y contra todo aquel que no comulgara con el pensamiento único de la Iglesia clerical, que no cristiana! Ahora, la Iglesia clerical aún mantiene la marginación e infravaloración no solo de los homosexuales sino también de las mujeres, por su permanente homofobia y misoginia.
¡Basta ya de demonizar a esas personas! En el Reino de Dios caben todos, menos las personas como el obispo Munilla o los que piensan como él, que no
tienen como bandera la máxima del cristianismo, la de “amaos los unos a los otros” sin hacer distinciones discriminatorias de ningún tipo.
La sociedad democrática, con su propuesta a favor de la igualdad de género en todos los ámbitos, del reconocimiento de la diversidad sexual humana con derecho a que las parejas no heterosexuales puedan casarse y en otros muchos aspectos, tiene más connotaciones cristianas que la propia Iglesia, que debería ser, y no lo es, un motor de progreso en el reconocimiento de los Derechos Humanos y de la dignidad que se merecen todos los seres humanos, especialmente los más vulnerables y marginados.
Amnistía Internacional ha lanzado este mensaje a quienes “transmiten la homofobia, la bifobia y la transfobia para recordar que los derechos de lesbianas, gais, bisexuales, transexuales e intersexuales son derechos humanos, que todas las personas tenemos derecho a ser felices y que el amor siempre gana”.
No me cabe la menor duda que el papa Francisco, por sus declaraciones a favor de los homosexuales y de las mujeres, piensa que el pensamiento y la actitud de la Iglesia clerical deben cambiar para adaptarse más al Evangelio y a los nuevos tiempos. El tiempo pasa, y todavía no hay evidencias de que esos cambios se hayan producido.
José Melero Pérez.
DOCUMENTO
El 17 de mayo de 1990 la Organización Mundial de la Salud eliminó la homosexualidad de la lista de enfermedades mentales. Esta efeméride, reconocida internacional como el día contra la homofobia, la bifobia y la transfobia, muestra, para Hu-Entiende, asociación LGTBIQ oscense, cómo el miedo a la diversidad sexual “impregnaba muchas instituciones, al igual que la mente de muchas personas”.
En el Estado español la homosexualidad dejó de ser delito hace 40 años, al eliminarse en 1979 los párrafos referidos a la homosexualidad de la ley de “Peligrosidad Social” que anteriormente se denominada de “Vagos y Maleantes”, y “aún así tras cambiar la ley la LGBTIfobia ha llegado hasta nuestros días en formas burdas como insultos y agresiones, y en otras más sutiles como los chistes y las bromas”, señalan desde esta asociación.
Según informes de Amnistía Internacional los derechos de Lesbianas, Gays, Bisexuales, Transexuales e Intersexuales (LGBTI) son pisoteados de forma permanente en muchos lugares del mundo. En cerca de 80 países son los propios Estados quienes vulneran los derechos con leyes que condenan las prácticas homosexuales consentidas entre adultos y adultas: este es el caso de
Camerún, con penas de hasta 5 años o de Irán, donde la homosexualidad se condena con la muerte.
En otros lugares las leyes limitan derechos fundamentales de la población LGBTI, como el derecho de manifestación y reunión o la libertad de Expresión. Por ejemplo en Rusia la ley prohíbe la “propaganda de la homosexualidad” a la vez que las autoridades impiden las concentraciones de activistas LGBTI, mientras que en la región de Chechenia se han denunciado secuestros y torturas masivas a hombres gais, apuntan desde Hu-Entiende.
En el resto de los lugares del planeta el respeto a los derechos humanos de las personas LGBTI tampoco está garantizado, por ejemplo, en Sudáfrica, Estado que permite el matrimonio igualitario y cuya constitución condena la discriminación por orientación sexual, es parte de la sociedad civil la que acosa a las mujeres lesbianas, organizando “violaciones correctivas” para curarlas. “En Honduras son las mujeres transexuales quienes son asesinadas en las calles, a veces a manos de agentes de la policía”, añaden.
En Alemania y Dinamarca aún hoy se siguen realizando intervenciones quirúrgicas innecesarias a menores intersexuales para “normalizar” su sexo, sin su consentimiento.
Por todo ello, esta asociación que celebra los logros conseguidos advierte de que queda mucho camino por recorrer y “debemos exigir y reclamar nuestros derechos para equipararnos a cualquier otra persona
JOSÉ MELERO PÉREZ, nació en Madrid el 15 de septiembre de 1941. Está licenciado en Psicología y en Geografía e Historia por la Universidad de Barcelona. Profesor jubilado. Actualmente escribe en su blog OJO CRÍTICO y en la sesión “Entre Todos” de El Periódico.
Vaya desde aquí mi más sincero agradecimiento por participar en este humilde sitio que es KRISIS.
Muchas gracias por esta publicación tan necesaria en estos tiempos de regresión fascista en contra de los derechos feministas y LGTBIQ+.
Gracias por seguir en la lucha.
Un fuerte abrazo en nombre de todo el colectivo🌈Feliz orgullo a todes🌈
Muchas gracias, Manuel. Veo necesario que todos los que pensamos en contra de cualquier discriminación alcemos la voz y nos manifestemos a favor de la dignidad de cualquier ser humano sin discriminación por el color de su piel, por su origen, por su género, por su tendencia sexual y por un sinfín de diferencias que nos convierten en los seres vivientes más diversos del planeta, y eso hay que valorarlo como una riqueza humana. Un fuerte abrazo a todo el colectivo LGTBI y mucha energía y constancia en haceros valer.
Gracias a ti y a todos vosotros. Otro fuerte abrazo para ti.
Muchas gracias José Melero Perez por su artículo sobre el príncipe de Orihuela.
Mucho tendría que callar el purpurado sobre la institución que representa, no sólo por sus miembros sino por la “credibilidad” que le otorga y por la facilidad de utizar a Jesús de Nazaret para fines a conveniencias. Ya llevamos más de veintiún siglos utilizándolo sin pudor y va siendo hora de aceptar que la humildad es una bienaventuranza que carecen muchos que se llaman católicos que la predican y lo que es más peliagudo que viven sin ella.
Podrían dejar de ser fariseos y mirarse al espejo de la Misericordia.
Muchas gracias, Concepción. Es cierto, como así lo confirma la historia, que la Iglesia clerical ha introducido muchos males en la humanidad, por sus hechos y pensamientos del pasado, recientes y del presente, instrumentalizando la figura de Jesús, al legitimarlos en nombre de Dios Es lo que yo llamo ateísmo eclesial, no en el sentido de negar a Dios , sino de aceptar su existencia para ir contra Él , con el agravante de creer y hacer creer que es el camino correcto. Es imposible mayor hipocresía y fariseísmo. La foto de presentación resulta muy clara: la alta jerarquía rindiendo honores a un dictador sanguinario . Dios aliado con un dictador , pero dando la espalda al colectivo LGTBI .
Gracias Juan Miguel por publicarme este artículo. La foto de presentación resulta muy clara: la alta jerarquía rindiendo honores a un dictador sanguinario . Dios aliado con un dictador , pero dando la espalda al colectivo LGTBI . No cabe mayor hipocresía y fariseísmo, como también mayor pecado al dar una imagen falsa y contrapuesta al Dios presentado por Jesús. Un fuerte abrazo.