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LA APORTACIÓN DEL BUDISMO (8)
EL NOBLE ÓCTUPLE SENDERO
Recto esfuerzo o diligencia correcta
Por Juan Miguel Batalloso Navas
Esforzarse, gastar energía personal en la realización de una tarea, un trabajo o un proyecto determinado es sin duda, algo completamente natural. Nada podemos conseguir si no disponemos de energía personal para conseguir cualquier objetivo o meta. Sin embargo, cuando el esfuerzo está dirigido por la competitividad salvaje, la acumulación de bienes u objetos o la satisfacción de necesidades no propiamente humanas y cuando además ese esfuerzo nos genera ansiedad, estrés, dolor y sufrimiento, es indudable que ese esfuerzo no es correcto como tampoco sano.
Para el budismo:
Para Thich Nhat Hanh el esfuerzo o la diligencia correcta debe ir acompañada siempre de alegría y buen humor. Si hacemos algo con desagrado necesariamente aparecerán emociones destructivas y por tanto estamos generando sufrimiento. Así pues, esforzarse es aceptar el hecho de que lo que tengamos que hacer debemos hacerlo pero siempre con satisfacción, alegría y disfrutando de la tarea que realizamos, lo cual implica partir de una visión correcta, un pensamiento y una acción correctos. Si nuestro esfuerzo no nos proporciona alegría es sin ninguna duda un indicador de que no nos estamos esforzando correctamente. En este sentido Thich Nhat Hanh nos cuenta que:

