

Alguien espera siempre
Aquí , junto al azul y el agua, en la hora del viento de las siete que acude cada día a acunar el paisaje, escucho el rumor del jardín y el silencio de una nube perdida. Es hora de tomarse unos sorbos de calma y sentir como crece la hierba, de saber que somos de la misma sustancia de las cosas humildes que callan y nos miran. Y un perfume de limón y de menta me llega en esta tarde, a las siete, junto al azul y el agua, junto al viento y la nube. Alguien espera siempre.

Envueltos en sensaciones,
atravesados por sombras y dardos mágicos de colores,
volvemos cada día
a sentir la rutilante agua
fluyendo como la vida
y sí, Víctor, siempre espera alguien.
Bello poema que me lleva de la mano a un Juan Ramón Jiménez joven. Gracias por compartir