


TE HACES ETERNO
Por Felipe José Fernández Garrido
Te haces eterno en el momento queu003cbru003eno ansías nada. Cuando la paz vieneu003cbru003etras calvarios y naufragios que teu003cbru003eembargaban; ya te haces eterno.u003cbru003eNada temes, pones la confianzau003cbru003een quien te creó un día; nada esperasu003cbru003ey la paz te coge por sorpresau003cbru003eocupado en los asuntos diarios,u003cbru003eviviendo cual pájaros y lirios.u003cbru003eTe haces eterno en el momento queu003cbru003ete abandonas y lo entregas todo.u003cbru003eCuando te contemplas sin juzgarteu003cbru003ey sólo es amor lo que te invade.

EL PERDÓN
Por Felipe José Fernández Garrido
Cuando una persona se arrepienteu003cbru003ede forma sincera del delito,u003cbru003ecuando toma conciencia de lou003cbru003eque antes era, llega el perdón, llegau003cbru003ela conversión y la vida llega.u003cbru003eEmpieza el perdón por uno mismo,u003cbru003eluego llega el perdón hacia el otro,u003cbru003ese siente perdonado ya por Dios,u003cbru003eabriéndose las puertas del Reino.u003cbru003eSiente la paz, la libertad plena,u003cbru003ecuando de verdad se ha arrepentido,u003cbru003ese caen cadenas, ya lo sufridou003cbru003efue penitencia, se ha redimidou003cbru003ey el perdón llega, siempre le llega.
(Inspirado en la película MAIXABEL)
FELIPE JOSÉ FERNÁNDEZ GARRIDO nació en Sevilla el 8 de junio de 1976, aunque la ciudad que lo vio crecer y en la que dio sus primeros pasos como poeta ha sido Camas (Sevilla). Es licenciado en Historia del Arte y ejerce como profesor de Secundaria. Ha publicado los poemarios En el mar de lo posible (2014) y Catorce formas de amar ( 2014). Ha colaborado en las antologías poéticas Bicentenario de Gertrudis Gómez de Avellaneda La eterna romántica (2014) y Versos para la vergüenza,libro solidario (2016) Homenaje a Gloria Fuertes en el centenario de su nacimiento (2017). Corazón sin Rejas recoge poemas escritos entre 2015 y 2016.
Vaya desde aquí nuestro agradecimiento más sentido por honrar con sus colaboraciones este humilde sitio.
Eternidad y perdón, perdón y eternidad, enlazados con un mismo origen e igual destino. Entre tanto, el desprendimiento como camino. Saludos Felipe José
¡Qué poema más consolador el de arrepentirse y cambiar de conducta para sentirse libre y en paz! Un gran abrazo, José.
Muchas gracias querido.