Contra el fascismo en Camas (9)

Desde que en 1945 finalizara la la IIª Guerra Mundial, han sido numerosísimas las investigaciones y estudios que se han realizado sobre el fascismo en sus más diversas perspectivas, ya sean políticas, económicas, históricas, culturales, filosóficas e incluso psicológicas. Hoy afortunadamente gozamos de una casi infinita documentación que está disponible para cualquiera que quiera enterarse o estudiar el fenómeno fascista, documentación que como todo el mundo sabe es accesible desde nuestros teléfonos móviles. Basta teclearlo en Google y en menos un segundo nos da cuenta de que existen casi 24 millones de entradas para el término. Con esto quiero decir simplemente, que excusarse por desconocimiento, alegando que “yo no sabía que…” es un argumento que se cae por su propio peso de ignorancia y omisión, cuando además cualquier ciudadano español que haya vivido total o parcialmente el franquismo, o esté atento a lo que está sucediendo en el mundo y en España en este momento político, sabe sobradamente lo que el fascismo, la ultraderecha y la derecha esencialmente significan.

Se podrá argumentar lo que se quiera, pero excusarse en la ignorancia ya no cuela, como tampoco cuela aducir razones del tipo “yo no entiendo de política” o “todos los políticos son iguales” y por eso “me quedo en casa” permitiendo irresponsablemente que la sociedad española o nuestra ciudad de Camas regrese al pasado y seamos gobernados por quienes desprecian la Democracia y su profundización haciéndonos creer que necesitamos mano dura para ordenar nuestra convivencia.

Sinceramente, salvo aquel fatídico día de 23 de febrero de 1981 del Golpe de Tejero del que ya tenemos muchos datos de quien lo instigó en la sombra y lo que significó, nunca antes he visto tan en peligro las conquistas sociales y políticas de esta sin duda imperfecta Democracia Constitucional, que por encima de todo y a mi juicio, es necesario defender. Y hay que defenderla desde luego y en primer lugar, de todos aquellos que pretenden apropiársela consiguiendo hasta cierto punto que nos olvidemos del desorden social naturalizado de la pobreza, los desahucios, el desempleo y la precarización, la Ley de Reforma Laboral, el retroceso de las libertades de la Ley Mordaza, las carencias en Sanidad y Educación, la insuficiencia de las pensiones, la histórica expulsión de un Presidente del Gobierno como consecuencia de la corrupción intrínseca y extrínseca de su partido (PP) o las extraordinarias ganancias de los Bancos a los que el Estado les ha perdonado sus millonarias deudas. Claro que para que olvidemos esto, así como otros acontecimientos como el fraude producido en las elecciones primarias en Castilla-León de Ciudadanos, o como las montañas de robo y corrupción en Cataluña del viejo partido CDC de Jordi Pujol, ahora PDeCat, se nos ofrecen espectáculos circenses a base de banderas y símbolos como si el único problema de España fuese el de su articulación territorial. Se trata pues de que votemos con las tripas, a partir de la crispación y de las barbaridades que los líderes de la derecha de siempre ofrecen para el consumo de ignorantes e ingenuos.

Así pues, me he decidido hoy a hacer una breve parada en el relato que inicié en el artículo anterior acerca de la identidad sociocultural de Camas y de como las derechas quieren reconducirnos al redil del conservadurismo y del fascismo sin que nos demos cuenta, o como si no pasara nada y diese igual que gobierne un partido político u otro. Sin embargo, lo que considero más lamentable, algo que tal vez se deba a ese miedo incrustado en nuestros genes por el franquismo que se ha ido transmitiendo de generación en generación, es que sin duda existen muchísimas personas y ciudadanos que subjetivamente en su interior rechazan toda forma de fascismo, pero después en su conducta pública ya sea en la calle, en el barrio, en la ciudad o en el grupo o asociación en la que participan, no se atreven a manifestarlo, por aquello que mi bondadosa y protectora madre me aconsejaba: “Hijo mío, tú piensa lo que tú quieras, pero no te señales y no te metas en política“.

Lo verdaderamente importante e indispensable para arrinconar y aislar al fascismo y a todas las organizaciones políticas que con sus idearios y programas lo promueven de uno u otro modo, consiste a mi juicio en seguir las pautas, testimonios y orientaciones que nos han legado grandes personajes, que con sus vidas nos han mostrado el camino para construir la Paz y la Fraternidad Universal en el metro cuadrado que cada ser humano pisa. Así por ejemplo creo con convicción que deberíamos aprender de Mahatma Gandhi, Martin Luther King, Nelson Mandela, Simone Weil, Rigoberta Menchú, las Abuelas de la Plaza de Mayo y otras muchas mujeres y hombres que antepusieron su comodidad y bienestar personal al servicio a la comunidad y a grandes valores éticos universales. Y es que luchar contra el fascismo no puede significar sacrificar la convivencia pacífica y democrática, como tampoco la necesidad de incluir a todas aquellas personas que diariamente trabajan y están comprometidas en la conquista y expansión de los Derechos Humanos Universales. Es decir, cualquier persona sensible y comprometida con los Derechos Humanos será siempre una compañera y aliada indispensable para combatir el fascismo sea cual sea el lugar donde se encuentre. Y esto es así porque como dice Lawrence Britt en su conocido artículo “Las 14 características del fascismo“, todo fascismo desprecia, margina, minusvalora e ignora los Derechos Humanos y mediante falaces y hábiles argumentos y procedimientos de propaganda, consigue que la mayoría de la población acepte o considere como normal el que se violen esos Derechos y se demonice, criminalice, margine y desprecie a quienes los defienden.

Soy plenamente consciente de que al fascismo no se le vence, convence, aísla o arrincona con argumentos racionales o mediante el uso del diálogo reflexivo y sereno. Su naturaleza y su más profundo carácter se funda y se contagia mediante impulsos emocionales, el gregarismo de la manada, la exaltación de cualidades como la valentía, el honor, la lealtad o el heroísmo que justifican y legitiman la violencia, el militarismo, la obediencia ciega al líder y sobre todo por la confianza que le otorgan muchas personas que prefieren abstenerse ya sea por miedo, pasividad, apatía o porque dicen que son “apolíticas“. Es a estas personas a las que se dirigía Martin Luther King cuando afirmó: “No me duelen los actos de la gente mala, me duele la indiferencia de la gente buena. La injusticia en cualquier lugar es una amenaza para la justicia en todas partes. He decidido apostar por el amor, el odio es una carga demasiado pesada“. En consecuencia, luchar, combatir y oponerse a cualquier forma de fascismo no significa cruzarse de brazos, abstenerse o refugiarse en rezos y meditaciones para alcanzar un estado psicofísico de paz interior (pacifismo pasivo y abstracto) sino actuar, movilizarse, hacerse visible en la calle y en todos los lugares utilizando todos aquellos métodos pacíficos y democráticos a nuestro alcance (pacifismo activo y concreto), para desenmascarar, denunciar y hacer todo lo posible para que el fascismo y sus actitudes ocupen el lugar que realmente merecen: el basurero de la Historia.

Todo esto lo digo especialmente para todas aquellas buenísimas personas de Camas, que estando comprometidas como lo están con los Derechos Humanos Universales de forma concreta, así como con la ayuda generosa a los demás o, que habiendo demostrado ampliamente su humanismo y su bondad, piensan que la creación de la PLATAFORMA CIUDADANA DE CAMAS CONTRA EL FASCISMO es un invento para hacer ruido, conseguir notoriedad, fomentar el enfrentamiento o incrementar la lucha electoral o el interés partidario y que por eso no se suman a esta noble, humilde y necesaria causa. Pero como resulta que son precisamente estas buenas personas, a las que algunas tengo la satisfacción y la alegría de conocer y de haber compartido con ellas muchas experiencias de amistad y cooperación, pues por mi cuenta y riesgo he decidido escribir estas notas. Y es que son únicamente estas buenas personas de Camas o de cualquier otra ciudad, las únicas que pueden reflexionar, ser sensibles, dialogar y ser permeables a la argumentación racional y al conocimiento, ya que el fascismo y sus adeptos siempre han despreciado todo lo que signifique ilustración, desarrollo intelectual, conocimiento y cultura de aquí que prefieran que en las Escuelas se domestique y aborregue a los ciudadanos a base de propaganda, doctrinarismo, dogmatismo y ausencia de pensamiento libre, crítico y autocrítico. Algo por cierto, de lo que fue un claro ejemplo la Escuela Nacionalcatólica del franquismo, pero por desgracia también, la Escuela actual que se desentiende de la Educación para Ciudadanía y los Derechos Humanos y la Educación Ética, Social y Politica para la Democracia..

Así pues y empeñado como estoy en desenmascarar y denunciar cualquier forma de fascismo, ya sea mediante estos escritos o con mi participación y adhesión a la PLATAFORMA CIUDADANA DE CAMAS CONTRA EL FASCISMO y asumiendo el riesgo de posibles acusaciones infundadas o de interpretaciones interesadas hacia mi persona, voy a seguir y seguiré comprometido en esta tarea con la que siento plenamente identificado y cuya energía obtengo de las numerosas personas buenas que me ayudan, me animan y se comprometen conmigo en esta noble causa.

En consecuencia, sigo y seguiré pronunciándome y comprometiéndome, hasta donde mis fuerzas me lo permitan, CONTRA CUALQUIER FORMA DE FASCISMO-especialmente en Camas-. Y si te gusta esta nota, divulga y comparte por favor. Y si consideras que vale la pena hacer algo en nuestra ciudad para que las fuerzas políticas de derecha y ultraderecha no consigan sus objetivos, súmate a la PLATAFORMA CIUDADANA DE CAMAS CONTRA EL FASCISMO, para lo cual puedes ponerte en contacto con nosotros en el correo camascontraelfascismo@gmail.com No tengas ningún miedo ni temor, porque eso es precisamente lo que quiere la ultraderecha, que sigamos en la pasividad y en el silencio para que ellos puedan conquistar espacios de influencia sin que nadie los desenmascare, los denuncie y democráticamente les haga frente. Y que conste, que lo único que nos mueve es hacer de Camas una ciudad más abierta, tolerante, intercultural, pacífica y democrática y tú que lees esto eres indispensable para ello. Sigamos !!!

5 thoughts on “Contra el fascismo en Camas (9)

  1. Es cierto que nadie puede excusarse de desconocer el fascismo como fuerza política que desprecia los Derechos Humanos y los valores inherentes de la Democracia. La derecha hace buenas migas con el fascismo y eso no podemos permitirlo porque eso significaría volver hacia atrás y darle a la historia un sentido cíclico en vez de otorgarle un sentido lineal de progreso hacia adelante . La cantidad de barbaridades que la derecha ha hecho en este país debería dejar pasmado a cualquiera y así cerrarle el paso para que no continúe engañándonos y cometiendo barbaridades. Un gran abrazo y ¡ Adelante, nunca hacia atrás!

    1. Muchas gracias José. Así es, aunque dar a la Historia “un sentido lineal de progreso” fue un gran ideal de la Modernidad, pero hoy con los datos que tenemos, ya no podemos hablar de linealidad, aunque sí de sentido, como tampoco podemos hablar con rigor de aquel “progreso” de la Modernidad que incluía socialismo y desarrollo de las fuerzas productivas, porque mira como está el Planeta. Hoy creo que tenemos que construir espacios, más que de progreso, de solidaridad y fraternidad y siempre en el marco y en la comprensión de la complejidad de las sociedades y nuestra propia condición humana. Permíteme recomendarte un libro, aunque lo mismo ya lo has leído, es “La Vía para el futuro de la humanidad” de Edgar Morin. Un abrazo grande y sigamos !!!

  2. Considero totalmente acertado la creación de una plataforma contra el fascismo. Especialmente en estos momentos que vuelven a salir de su letargo y acaban de perder el miedo y lo que es más grave dada la situación política que vivimos, la dispersión de la izquierda y los votos que están consiguiendo ante la falta de soluciones que plantea la derecha. Por lo tanto es necesario hoy más que nunca dejar las cosas muy claras y pedirle a la izquierda que no divague en cosas superfluas y planteen un programa de lo que verdaderamente interesa a nuestra clase.
    Así que adelante con esta iniciativa y que el ciudadano de a pie sepa a qué debe de atenerse a la hora de depositar el voto.

Me encantaría que hicieras un comentario. Muchas gracias.